lunes, 23 de agosto de 2010

Un disco que no abandonaré

No acostumbro a escribir en mi blog sobre grupos españoles, la razón es porque desgraciadamente escucho menos música española de la que me gustaría. ¿Los motivos? Pues me gustaría saberlos, quizás soy demasiado radical o quizás no hay muchos grupos, y hablo desde un punto de vista estrictamente personal, que me ofrezcan propuestas interesantes, pero he de reconocer que desde hace un par de años intento escudriñar el panorama musical español en busca de nuevos grupos y de vez en cuando se pueden encontrar agradables sorpresas, es el caso de Vetusta, Standstill, Love of Lesbian, L.A., Second o nuestros protagonistas de hoy, los granadinos Lori Meyers.


En los últimos años Lori Meyers se han convertido en uno de los grupos más relevantes del panorama indie nacional, sobre todo después de su tercer disco, Cronolanea, un excelente álbum que los consolidó como uno de los grupos con más futuro del pop español. Dos años después, estos todavía veinteañeros, acaban de publicar el cuarto de sus trabajos Cuando el destino nos alcance, un disco al que desde su lanzamiento le ha acompañado la polémica, y eso a un grupo siempre le favorece, ya que como se suele decir en estos casos es bueno que hablen de uno aunque sea mal.

Y es que es inevitable que cuando un grupo publica un gran disco, como fue Cronolanea, las expectativas ante su siguiente trabajo sean muy altas. Desde que empezaron a filtrarse los primeros sonidos de Cuando el destino nos alcance aparecieron los debates sobre si los cambios introducidos por los granadinos eran o no acertados. Personalmente creo que el sonido de Lori Meyers no ha cambiado excesivamente, tampoco podemos decir que este disco es un Cronolanea II, porque si es cierto que existen diferencias más que reconocibles entre un trabajo y otro, pero el cambio no es tan radical como desde los círculos independientes más puristas se adelantaron a censurar.

Es un disco con muchísima más presencia electrónica, como ellos mismos han confesado, las canciones tienen su origen en el teclado como instrumento de composición y no la guitarra acústica como en discos anteriores, ahora son 6 en lugar de 4 con lo que las posibilidades de hacer cosas nuevas se han visto aumentadas y sobre todo se han arriesgado grabando el disco en los estudios Castle Oaks de Los Angeles con uno de los mejores productores del mainstream latino, Sebastian Krys, ganador de 8 grammys por sus trabajos con Shakira, Bisbal o Luis Fonsi, y que a pesar de ser un más que reconocido productor se aleja bastante del carácter indie de los de Granada.

Todas estas novedades no han supuesto un giro de 180º en el sonido original de Lori Meyers sino que han servido para sumar a todas las virtudes de sus discos anteriores. Cuando el destino nos alcance suena joven, renovado, conserva la capacidad de los granadinos para componer singles de estribillos pegadizos y melodías irresistibles y coreables pero con un plus añadido de energía y de ritmos, efectos y sonidos mucho más bailables que en discos anteriores, y es aquí donde más se notan las nuevas líneas de teclado y los efectos electrónicos.

Pero lejos de arreglos electrónicos, viajes a California y productores con muchos grammys, Cuando el destino nos alcance suena bien, muy bien, es un disco fresco, dinámico, un paso al frente en la carrera de Lori Meyers que han arriesgado y les ha salido bien, un disco que no deja tiempo para el relax, donde a sus ya conocidas influencias se han sumado propuestas de grupos indies mucho mas electrónicos como Of Montreal o Radio Dept, o las de grupos clave de la música independiente actual como The Strokes o su líder Julian Casablancas, pero también encontramos sonidos ochenteros e incluso sesenteros y todo esto dice mucho de los granadinos.

La primera de las canciones es Mi Realidad, un single en toda regla, una canción con guitarra, batería y ritmo rock como siempre, pero con la novedad de la batería electrónica, que aparece por primera vez en los discos de Lori Meyers, y del teclado, que aportan un ritmo mucho más intenso. No es la mejor canción del disco pero si la que mejor puede funcionar como single, directa, ágil, 3 minutos que no dejan tomarte un respiro y que sirven de declaración de intenciones de lo que pueden llegar a hacer en este nuevo trabajo.



Después de Mi Realidad el disco sube y ya no baja hasta el último corte, con canciones como Corazón Elocuente, progresiva, con una base melódica de bajo que hipnotiza y que junto con los logradísimos arreglos nos recuerda a las canciones de la Motown allá por los 50, de letra fácil pero estribillo terriblemente pegadizo… y no será el único.

Una de las apuestas más arriesgadas del disco, y a la vez uno de los mayores aciertos, es la tremenda ¿A-ha han vuelto? Homenaje claro al synthpop de los años 80 y a la música disco de aquella época, genial el principio de la canción que recuerda a las canciones de Pet Shop Boys y muy conseguido el jugueteo con el sampler que la convierten sin ninguna duda en lo mejor del disco.

Castillo de Naipes es eficaz, simple, pero resolutiva, de las pocas canciones tristes del disco y suena descaradamente a pop español de los 60, a las composiciones de Fernando Arbex y sus Brincos tan habituales en todos los trabajos anteriores de Lori Meyers. Personalmente creo que la mejor canción del disco es Rumba en Atmosfera Cero, es lo que el título indica, una rumba, pero con un toque de modernidad bestial y con letra muy de película de ciencia ficción, algo muy presente en todo el disco. Curiosa mezcla la del astronauta perdido en el espacio a ritmo de rumba pero funciona a la perfección, un temazo.

Nuevos tiempos y Ventura suenan más a los discos anteriores. La primera es potente, con un estribillo pegadizo y con mucha mayor presencia de las guitarras eléctricas que en el resto de canciones del disco. La segunda suena muy americana, muy folk, la letra ayuda, al igual que el sonido de la guitarra acústica y una especie de banjo que te envuelve en un ambiente bucólico y tranquilo, objetivo cumplido.

Otro de los pelotazos de Cuando el destino nos alcance es Religión, un salto al vacío sin paracaídas del que vuelven a salir tremendamente airosos. Una crítica feroz a la sociedad de consumo actual en la que es sin duda la canción más bailable del disco, más pop, suena joven, con un pelín de chulería y divismo que puede llegar a resultar hasta hortera, pero con un comienzo y un estribillo arrollador, una de las mejores canciones del disco y posiblemente de toda su discografía.

Explícame tiene un estribillo pegadizo, que seguro funcionará muy bien en directo, destacan los arreglos de violín y el comienzo de canción que me recuerdan a la serie Vacaciones en el mar, es en detalles como este, rozando el petardeo, donde se puede apreciar que han hecho lo que han querido sin pensar más allá, y en este caso le da a la canción un toque maravilloso. Condicional hipotética es potente, es 100% Strokes, sobre todo por el sonido de las guitarras y la batería y no tiene nada que envidiar a ninguna de las composiciones de los neoyorkinos.

El disco se cierra con Enhorabuena eres el que tiene más, una especie de canción pachanga con otra critica a la sociedad consumista de fondo, es sin duda la peor canción del disco y quizás no ha sido la mejor forma para cerrar este trabajo, pero uno no puede ni debe olvidarse de las 10 canciones anteriores.

Formar parte del negocio de la música independiente y ser de Granada no es nada fácil, siempre tendrás la sombra alargada de grupos referentes como Los Planetas o Lagartija Nick, pero Lori Meyers han ido poco a poco deshaciéndose de esa sombra y han conseguido hacerse un hueco, y de grandes dimensiones, dentro del panorama pop nacional. Cuando el destino nos alcance es un excelente disco, con el que han pretendido dar un paso hacia adelante en su carrera, han apostado fuerte y han ganado, y sobre todo han conseguido desarrollar en 11 cortes todo lo que les apetecía hacer, aunque no todo el mundo haya compartido esa idea con la misma ilusión. Su productor Sebastian Krys les dijo durante la grabación del disco que “los discos no se terminan, se abandonan”, pues yo por si acaso este no pienso abandonarlo, porque sé que tengo Lori Meyers para rato.

2 comentarios:

  1. Muy instructivo, jose antonio...a propósito creo que los sunday drivers al final se separan
    lo que me parece una pena con el buen camino que llevaban.

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  2. Este martes tocan gratis en fuenla, con sidonie y annie-b-sweet... Si te animas.

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